El régimen simplificado, anunciado con bombos y platillos por el ministro de Economía, Luis Caputo, prometía evitar los controles exhaustivos de ARCA.
Un reciente decreto del Poder Ejecutivo limita el acceso al nuevo régimen simplificado del impuesto a las Ganancias, dejando fuera a aquellos contribuyentes con ingresos provenientes del exterior. Esta restricción, aunque justificada por la imposibilidad técnica de ARCA (la agencia de recaudación) de rastrear rentas extranjeras, debilita el ambicioso plan del gobierno para incentivar la repatriación de «dólares del colchón», o ahorros no declarados.
El régimen simplificado, anunciado con bombos y platillos por el ministro de Economía, Luis Caputo, prometía evitar los controles exhaustivos de ARCA, al ofrecer un cálculo predeterminado del impuesto a las Ganancias basado en la facturación y los gastos deducibles declarados. Sin embargo, el decreto 353 establece que esta opción solo estará disponible para quienes tengan ingresos exclusivamente generados en Argentina.
Esta limitación generó confusión y críticas. Inicialmente, el director ejecutivo de ARCA, Juan Pazo, sugirió que el régimen estaría abierto a todos los contribuyentes, independientemente de la fuente de sus ingresos. Posteriormente, ARCA aclaró que se está trabajando en una normativa para incluir a aquellos con rentas extranjeras, con la esperanza de tenerla lista antes del 1° de junio, fecha de inicio del nuevo régimen.
¿Qué implica esta exclusión?
-Quienes tienen ahorros en el exterior, y por ende, posiblemente ingresos generados allí, se verán menos incentivados a traerlos de vuelta si no pueden acceder a la simplicidad del nuevo régimen.
-ARCA reconoce la dificultad de acceder a información detallada sobre las rentas generadas fuera del país, lo que justifica la exclusión inicial. La información disponible a través de acuerdos internacionales suele ser limitada a saldos bancarios, y no a la totalidad de los ingresos.
-Expertos tributarios cuestionan si una simple resolución de ARCA puede extender el régimen a quienes tienen rentas extranjeras, dado que el decreto original limita explícitamente su acceso.
-El plan de no cruzar datos de consumo con los ingresos declarados, para incentivar el uso de los «dólares del colchón», genera interrogantes sobre las normas anti-lavado de activos, especialmente cuando se habla de compras millonarias sin una justificación clara de los fondos.
La promesa oficial
El gobierno insistió en que, al adherirse al régimen simplificado, ARCA no investigará el incremento patrimonial ni los consumos de los contribuyentes, incluso para compras de bienes registrables superiores a $50 millones. Esta flexibilidad, pensada para atraer capitales no declarados, provocó tanto entusiasmo como preocupación.
Mientras ARCA trabaja para resolver las limitaciones técnicas y normativas, la incertidumbre persiste sobre el alcance real del nuevo régimen simplificado y su impacto en la repatriación de capitales. Los contribuyentes con ingresos en el exterior deberán esperar para ver si finalmente podrán acceder a esta opción, y en qué condiciones.
