La derrota del PRO fue el otro gran impacto de la jornada. Por primera vez desde su fundación, el partido de Macri no logró imponerse en una elección local.
La Libertad Avanza (LLA) dio el batacazo este domingo en la Ciudad de Buenos Aires: con Manuel Adorni como cabeza de lista, se impuso en las elecciones legislativas y rompió por primera vez en casi dos décadas la hegemonía del PRO en el distrito porteño. Detrás quedaron Leandro Santoro (Es Ahora Buenos Aires), y en un sorpresivo tercer lugar, Silvia Lospennato, la candidata del macrismo.
Con el 30,14% de los votos escrutados, el oficialismo nacional logró consolidar su influencia en el corazón político de la Argentina. La elección —desdoblada de los comicios nacionales y sin PASO— se realizó con boleta única electrónica y estuvo marcada por una baja participación, que apenas superó el 53%.
La victoria libertaria no solo consagró a Adorni, sino que le permitió al bloque de Pilar Ramírez renovar seis bancas y sumar cinco nuevas, alcanzando trece escaños en la Legislatura a partir de diciembre. Un crecimiento significativo que posiciona a LLA como un actor central en el mapa legislativo porteño.
Javier Milei, eufórico, celebró en redes sociales con una frase que ya es marca registrada: «¡Viva la libertad, carajo!». Lo hizo con una publicación escueta en X, replicando el estilo de su portavoz. Más tarde compartió una foto junto a Karina Milei y Santiago Caputo, arquitectos clave del armado político libertario.
La derrota del PRO fue el otro gran impacto de la jornada. Por primera vez desde su fundación, el partido de Mauricio Macri no logró imponerse en una elección local. Con apenas el 15,93%, Lospennato quedó tercera, detrás de Santoro, que obtuvo el 27,34%. El bloque que lidera Darío Nieto sumará tres nuevas bancas, pero no alcanzó los números necesarios para recuperar protagonismo legislativo.
La jornada electoral también estuvo atravesada por denuncias de campaña sucia: el sábado circuló un video falso —generado con inteligencia artificial— donde un supuesto Mauricio Macri afirmaba que su candidata no se presentaría. El exmandatario apuntó contra La Libertad Avanza y acusó directamente a Santiago Caputo. “Es un intento de fraude digital. No me digan ahora que son tuiteros sueltos cuando el hombre más poderoso del Gobierno tuitea estos videos”, dijo en conferencia de prensa.
Milei no se quedó callado. Al ser consultado sobre las acusaciones, respondió con ironía: «Macri es un llorón. A los del PRO se los ve muy de cristal», declaró.
En tanto, Santoro, si bien no logró la victoria, consiguió mantener al peronismo como primera minoría en la Legislatura. Su bloque, liderado por Claudia Neira, pasará de 18 a 20 bancas. Desde allí, se perfila como un contrapeso clave frente a una Legislatura cada vez más fragmentada.
Por fuera de los tres espacios principales, Horacio Rodríguez Larreta (Volvamos Buenos Aires) quedó cuarto con el 8% y aportará tres escaños. El Frente de Izquierda, con Vanina Biasi, retuvo una de las dos bancas que ponía en juego y continuará con presencia en el recinto.
Las elecciones 2025 en la Ciudad reconfiguraron por completo el tablero político porteño. La hegemonía del PRO es cosa del pasado. La Libertad Avanza se consolidó como nueva fuerza dominante y el peronismo conserva músculo legislativo. Mientras tanto, Javier Milei celebró su avance: más poder, más presencia, más control.
