Los bonos en dólares bajo ley extranjera cerraron este viernes con mejoras de hasta 1%, impulsados por el optimismo tras las últimas señales políticas.
El mercado financiero argentino cerró la semana posterior a las elecciones legislativas en un clima de marcada euforia. Bonos y acciones volvieron a registrar fuertes subas este viernes.
Los días posteriores al triunfo de La Libertad Avanza (LLA) marcaron un punto de inflexión para los mercados. Desde el lunes, los inversores iniciaron compras masivas de títulos soberanos y papeles de empresas argentinas que cotizan en Wall Street, lo que impulsó una baja del riesgo país, que se acercó a los 600 puntos, el nivel más bajo en lo que va del año.
Los bonos en dólares bajo ley extranjera cerraron este viernes con mejoras de hasta 1%, impulsados por el optimismo tras las últimas señales políticas. El mercado reaccionó de manera positiva a la reunión que el presidente Javier Milei mantuvo el jueves con la mayoría de los gobernadores, en la que se avanzó en negociaciones sobre reforma laboral y tributaria.
En el caso de las acciones, los avances fueron generalizados tanto en el mercado local como en Wall Street. El Merval trepó un 8% en pesos y alcanzó un récord nominal tras la escalada de los últimos días. Aunque el panel líder medido en dólares aún se mantiene por debajo del máximo alcanzado a comienzos del año, también mostró una fuerte tendencia alcista desde el resultado electoral favorable para La Libertad Avanza.
En Nueva York, los ADR -los papeles de compañías argentinas que cotizan en la plaza norteamericana- mostraron subas de más del 10% en casos como Banco Supervielle y Banco Galicia. También se destacaron los avances de Pampa Energía, Central Puerto, BBVA, Transportadora Gas del Sur, Edenor y Banco Macro.
El riesgo país, en mínimos del año
En este contexto, el riesgo país continuó su marcada caída desde el lunes posterior a las elecciones. El índice elaborado por JP Morgan se acercó a los 600 puntos, mientras que el mínimo del año se había registrado en enero, con alrededor de 560 unidades.
De acuerdo con analistas financieros, este descenso aceleró los tiempos para una posible vuelta del Gobierno a los mercados internacionales de deuda, un camino que varias empresas argentinas ya comenzaron a recorrer durante 2025.


