En las últimas horas fue suspendida como docente en la Universidad Austral.
Julieta Makintach, jueza del Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de San Isidro, atraviesa un momento clave. Aunque forma parte del juicio que busca establecer responsabilidades en la muerte de Diego Maradona, su continuidad en el proceso quedó en duda. El motivo: la apertura de una investigación por su presunta participación en un proyecto audiovisual relacionado con el caso.
Makintach, quien lleva más de dos décadas en la Justicia y es jueza desde 2017, se incorporó al Tribunal Oral N°3 como tercera integrante, ya que ese cuerpo contaba sólo con dos jueces titulares. Pero después trascendieron imágenes que la mostrarían participando en filmaciones vinculadas a un eventual documental sobre el juicio, lo que encendió las alarmas. El fiscal Patricio Ferrari solicitó suspender el juicio por 10 días, argumentando la “gravedad institucional” del asunto. Si bien el tribunal no accedió al plazo completo, sí canceló una audiencia para analizar el tema. “Estoy segura de mi imparcialidad. Daré las explicaciones necesarias. Si hay algo que compromete el proceso, quizá sea yo quien se aparte”, dijo Makintach ante los presentes en la última audiencia. La jueza expresó su voluntad de aclarar la situación y defendió su desempeño.
Los abogados Fernando Burlando y Rodolfo Baudy presentaron una denuncia para que se investigue si existieron negociaciones con productoras sin conocimiento de las partes, lo que podría haber afectado la transparencia del proceso.
La jueza, fue suspendida como docente en la Universidad Austral donde dictaba clases de Derecho Penal y que horas más tarde, publicó fotos íntimas en su cuenta de Instagram, afronta horas cruciales para saber si continúa al frente del caso o da un paso al costado.