Gustavo Sáenz sostuvo que La Libertad Avanza ya no tiene «leones».
En una entrevista radial concedida este lunes, el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, analizó la derrota de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires y atribuyó el resultado al malestar social. “Esto demuestra claramente que la gente no la está pasando bien y que hay que hacer cosas”, señaló en diálogo con Aries.
Sáenz cuestionó la falta de propuestas concretas de los dirigentes nacionales y reclamó un debate entre candidatos locales:
“Me encantaría que se convoque a los candidatos a senadores para ver quién tiene capacidad, quién tiene idoneidad y quién va a defender los intereses de los salteños”.
Respecto de su relación con la Casa Rosada, el mandatario aseguró que nunca actuó como delegado del poder central:
“Nunca fui genuflexo ni delegado nacional de nadie, siempre peleé por los salteños y lo demostré desde que era intendente”.
El gobernador también lanzó una dura crítica a la gestión nacional con una frase que rápidamente se volvió viral:
“¿Qué hizo el gobierno nacional? Terminó siendo paloma de iglesia, cagó a todos los fieles. Se quedó con lo peor. Yo creo que el presidente tiene que dar un volantazo”.
Finalmente, Sáenz subrayó que su prioridad es defender los intereses provinciales:
“El límite de nuestras convicciones es la necesidad y los derechos de los salteños. No podemos levantar la mano votando en contra de Salta. El que hace eso es traidor a su patria chica”.