El S&P Merval cayó un 3% en la apertura de los mercados locales, ubicándose en 2.159.678 puntos, mientras que el riesgo país se mantuvo en 710 unidades. Las acciones líderes como Cresud, Irsa y Pampa Energía lideraron las bajas, con caídas de hasta el 5%. En tanto, los ADRs de compañías argentinas que cotizan en Wall Street también mostraron retrocesos de hasta 4,8%, con excepción de Despegar, que subió un 1,5%.
Los bonos en dólares locales también registraron pérdidas, destacándose caídas en títulos como el Global 2038 (-0,8%), el Global 2041 (-0,6%) y el Global 2035 (-0,6%). Esta tendencia se da en un contexto de alta volatilidad tras la flexibilización del sistema cambiario y la firma de un nuevo préstamo millonario con el FMI, en un mercado que opera sin intervención activa del Banco Central.
Desde el Grupo IEB explicaron que la volatilidad actual es parte de un proceso lógico de adaptación al nuevo esquema de flotación cambiaria, donde el tipo de cambio busca su equilibrio natural dentro de las bandas. La entidad destacó que el Banco Central podría intervenir si fuera necesario, gracias al nivel actual de reservas.
Por su parte, Delphos Investment analizó que, a pesar de los desafíos estructurales que persisten en Argentina, la nueva administración ha iniciado un cambio de rumbo positivo. Según su visión, la reducción de la demanda de financiamiento público y los incentivos a grandes inversiones podrían permitir que la economía supere sus máximos históricos e inicie una senda sostenida de crecimiento.
